
El gobernador de la Provincia, Rodolfo Suárez, se defendió públicamente de la acusación de la sedición por no acatar el feriado nacional del pasado 2 de septiembre. La denuncia la realizó la legisladora kirchnerista Maria Uceda en el Juzgado Federal Nº 3.
Suárez afirmo que desde el gobierno se decidió que el día debía ser trabajado con normalidad, ya que la decisión fue en un horario no muy acertado. Se justificó diciendo: “Decidimos apostar al trabajo. Creíamos que no era pertinente parar un país para manifestarse políticamente”.