¿Dónde se filmó K.O.? Las locaciones reales de la película que arrasa
La ciudad elegida fue clave para construir la intensidad de este thriller francés.
La película K.O. llegó a Netflix y rápidamente se convirtió en una de las más vistas. Este impactante thriller francés, dirigido por Antoine Blossier, tiene como protagonista a Bastien, un luchador de MMA atrapado en una espiral de culpa, violencia y redención. Más allá de la historia, uno de los elementos que más destacan es el entorno visual: la película fue rodada en escenarios reales que aportan autenticidad, y que, a su vez, reflejan la tensión que recorre cada escena.
¿Qué ciudad fue el corazón del rodaje?
Todo se filmó en Francia, con Marsella como la gran protagonista. Esta ciudad portuaria del sur del país sirvió como telón de fondo para capturar tanto la crudeza de la vida callejera como la belleza arquitectónica que convive en sus barrios. Desde el inicio del rodaje en mayo de 2024 hasta su finalización en julio, el equipo de producción utilizó locaciones clave como Saint-Pierre, la Place de la Major, Frais Vallon y el Boulevard du Redon. Estos sitios no solo dieron marco a la acción, sino que también ayudaron a construir una narrativa visual que acompaña el tono del filme.
¿Qué locaciones se usaron durante el rodaje?
Entre los lugares más reconocibles que aparecen en la película se encuentran el Puerto Viejo (Vieux-Port), símbolo histórico de la ciudad, y la Unidad de Habitación de Le Corbusier, un edificio icónico que representa la modernidad de la urbe. También se filmaron escenas en la Porte d'Aix, la Abadía de Saint-Victor y La Vieille Charité. Estos espacios no solo suman riqueza visual, sino que aportan profundidad simbólica al viaje del personaje principal.
Además, para las escenas de combate, el equipo de producción combinó filmaciones en un estadio real de la UFC con tomas en un set especialmente montado en Marsella. La autenticidad que transmite cada golpe se debe, en parte, al compromiso del propio Gane, quien entrenó intensamente durante toda la filmación sin interrumpir su preparación profesional.
Con locaciones reales y un elenco comprometido, K.O. se distingue por su mirada cruda y humana sobre la redención. La elección de Marsella no fue casual: fue una decisión artística que permitió elevar la historia y darle un tono único. Una ciudad viva, conflictiva y hermosa, perfecta para un personaje que intenta rehacerse entre sombras y combates.