Final explicado de "Marcada": cómo termina la nueva serie sudafricana de Netflix
Una historia que termina con giros inesperados y momentos decisivos para sus protagonistas.
Netflix estrenó recientemente "Marcada", una miniserie sudafricana compuesta por seis episodios, que ya se metió en el top 10 de lo más visto de la plataforma. El drama policial se centra en Babalwa Godongwana, una exoficial de policía que ahora trabaja como chofer de camiones blindados para la empresa Iron Watch, en Johannesburgo. Su vida da un vuelco cuando a su hija, Palesa, le diagnostican un cáncer agresivo y costoso de tratar. Sin seguro ni ayuda, y con su marido Lungile desempleado, Babalwa toma una decisión extrema: participar en un atraco perfectamente planificado.
¿Cómo se organiza el atraco y quiénes forman parte del plan?
El equipo que arma para el robo es tan singular como arriesgado: vecinos, conocidos y hasta compañeros de iglesia se suman al plan, en parte por necesidad y en parte por fe en Babalwa. El golpe está programado para coincidir con la llamada "Semana del Infierno", un período donde las oficinas centrales de Iron Watch cuentan con menor seguridad. El plan se apoya en los cortes programados de luz para desactivar cámaras, anular alarmas y cortar las comunicaciones. "Tenemos tres minutos exactos", dice Babalwa en uno de los momentos clave. La operación enfrenta obstáculos inesperados: cambios en el cronograma de apagones, el despido de una cómplice (Ntsiki), e incluso la aparición sorpresiva de la policía.
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Aun así, logran escapar con el botín y esconderlo en un viejo escondite de Baba G, un criminal que iba a liderar originalmente el atraco. Pero la tranquilidad dura poco: Razor, asesino de Baba G, exige su parte por haberles dado las armas, mientras Kat, excompañero de Babalwa en la policía, llega con sed de venganza. El enfrentamiento culmina en un tiroteo: Razor muere abatido por Zweli, un joven cercano a Babalwa, y ella, en un giro inesperado, salva a Kat y le entrega parte del botín, en lo que parece un gesto de redención. "Tomá lo tuyo y desaparecé", le dice, intentando cerrar ese capítulo.
¿Cuál es el desenlace final y qué revela sobre la protagonista?
Sin embargo, el verdadero punto de quiebre llega cuando Zechariah, el director de Iron Watch y padre de una de las cómplices, se entera de lo sucedido. En una discusión tensa en la iglesia, amenaza con delatarlos. En medio del forcejeo, Babalwa le dispara y lo mata. Junto a Zweli, entierran el cuerpo. Mientras lo hacen, recibe un mensaje de voz de su esposo: "Zechariah hizo una gran donación para la operación de Palesa", dice emocionado. Pero lo que él no sabe, y ella descubre demasiado tarde, es que esa supuesta donación fue una transferencia de los fondos robados. En ese instante, Babalwa comprende su destino: ya no hay marcha atrás, ha cruzado una línea irreversible.