La historia detrás de uno de los himnos del rock
Sweet Child O Mine, una relación tóxica de golpes y besos.
Publicado el 21 de julio, el disco de Guns N Roses Appetite for destruction se convirtió en un símbolo del rock de los 80. Particularmente uno de sus sencillos se haría mundialmente famoso, pero escondería una historia tóxica.
Sweet Chid O Mine, un amor tóxico
Cuando el vocalista Axl Rose la escribió estaba sumamente perdido por una mujer: Erin Everly. El joven vocalista de los Guns había regresado a su ciudad natal, Lafayette, en Indiana. Esta ciudad sería descrita por el propio músico como un Auswitch para su vida.En una de esas ocasiones, borracho, en un bar de esta ciudad despreciada por muchos norteamericanos, Axl comenzó a jugar con varias de las ideas que le venían a la cabeza y plasmó varias estrofas en papel.
Se trataba de un poema de amor dedicado a la joven Everly. La niña que lo había conocido mucho antes de que Axl fuese famoso por liderear a los Guns N Roses. De este embelesamiento saldría el poema largo que Rose cantaría en Sweet Child O Mine. Un himno al amor saturado de mucho rock, pero no todo es color de rosas. Axl era famoso, también, por ser un hombre violento y borracho. Sus ataques de ira ya eran tan comunes, cada día, que rara vez se le veía calmado. Con el tiempo, la pareja se distanciarían y años más tarde ambos entrarían en juicio ya que Everly lo demandaría por todos los daños que sufrió por parte del cantante.