La Isla al sur de Chile cuyos paisajes y forma de vivir te sorprenderán
Esta es la isla Inaccesible. Un paisaje en la Patagonia chilena que no se parece a ningún otro.
Ubicada en la remota Patagonia chilena, la Isla Madre de Dios es un paraíso natural que desafía los límites de la geografía y la resistencia humana. Apodada la "Isla imposible" por su clima extremo y su terreno accidentado, esta isla es la mayor del archipiélago del mismo nombre. Sus 116,403 hectáreas albergan una combinación única de lluvias constantes, vientos de más de 120 km/h y formaciones de piedra caliza que han dado origen a paisajes espectaculares y cavernas que atraen a científicos de todo el mundo.
Explorar la Isla Madre de Dios es como adentrarse en una cápsula del tiempo. Aquí se encuentran rastros de los antiguos Kawésqar, quienes habitaron la región hace unos 6,000 años y navegaban sus canales y fiordos. También es hogar de raras formaciones subterráneas, entre ellas la sima más profunda de la zona, de 300 metros, y más de 3,500 metros de galerías subterráneas. Los vestigios arqueológicos y las pinturas rupestres en las cavernas son testimonios de la vida ancestral en este entorno inhóspito pero de una belleza incomparable.
Con su postulación ante la UNESCO, Chile busca que Madre de Dios sea reconocida como Patrimonio Natural de la Humanidad. Esta isla no solo es un lugar de fascinación científica y geológica, sino un santuario natural que, al ser protegido, permitirá que futuras generaciones puedan maravillarse con su imponente paisaje y comprender mejor los procesos naturales que la han esculpido. Visitarla es una oportunidad única para descubrir uno de los tesoros mejor guardados de la Patagonia.