¿Quién fue Santa Cecilia y por qué se celebra el Día de la Música en su honor?
Este viernes se celebra el Día de la Música conmemorando a Santa Cecilia.
Santa Cecilia es una de las figuras más veneradas de la Iglesia Católica. Su vida, marcada por la fe y el sacrificio, ha sido inmortalizada tanto en la tradición cristiana como en el arte. Celebrada el 22 de noviembre, la historia de Cecilia ha sido transmitida a través de los siglos, aunque gran parte de la información sobre ella proviene de la leyenda, ya que los detalles históricos son escasos, pero en su honor se celebra el Día de la Música.
Por qué se celebra el Día de la Música
Sin embargo, poco tuvo que ver su vida con la música. Los especialistas subrayan que se trata de una confusión milenaria respecto a la versión escrita de su biografía en latín. En el medioevo sostenían que en el día de su boda Santa Ceclia "cantantibus organis, es decir, mientras sonaban los órganos, la santa decantaba en su corazón con las palabras ‘guarda, Señor, mi corazón y mi cuerpo inmaculados, para que no me confunda'". Por eso, se la consideró la patrona de la música.
A pesar de esto, Santa Cecilia no cantaba, como pensaban los medievales, su pureza virginal el día de su boda en medio de la alegre armonía de los órganos. Sino que rezaba candentibus organis, es decir, mientras se quemaban los instrumentos de tortura.
Quién fue Santa Cecilia
La tradición cuenta que Santa Cecilia estaba prometida en matrimonio a un joven llamado Valeriano, pero, a pesar de su compromiso, ella había hecho un voto de virginidad y consagración a Dios. Durante la boda, cuando su esposo descubrió su devoción religiosa, se sintió profundamente conmovido.
Valeriano, al igual que su hermano Tiburcio, se convirtió al cristianismo y comenzó a practicar su fe. Ambos fueron martirizados por negarse a rendir culto a los dioses romanos, un sacrificio que, según la leyenda, Cecilia aceptó con valentía. La joven mártir fue arrestada por las autoridades romanas debido a su fe, y durante su proceso de condena sufrió varios intentos de ejecución, todos ellos fallidos.
Según las fuentes legendarias, Santa Cecilia fue sometida a una brutal tortura, pero ningún método logró quitarle la vida. Finalmente, fue decapitada.