Quién es el narco ecuatoriano que envió a su familia a Córdoba

Un intenso operativo de seguridad que involucró a numerosas fuerzas de seguridad logró encontrar en una casa del exclusivo barrio cerrado Valle del Golf, sobre ruta C45, a ocho personas que tienen directos vínculos con un reconocido y peligroso narco ecuatoriano que es intensamente buscado tras su reciente “desaparición” o fuga desde la cárcel en que se encontraba en aquel país.

Se trata de José Adolfo Macías Villamar, alias “Fito” Macías, pero también conocido como “el patrón”, como se hace llamar incluso en canciones que hay en su honor.

Se trata del líder de la banda de “Los Choneros”, la agrupación delictiva ecuatoriana más poderosa, a la que atribuyen nexos con el cártel mexicano de Sinaloa, y el protagonista desde comienzos de este mes de una misteriosa desaparición a la que sobrevino una espiral de violencia y la declaratoria del país en “conflicto armado interno”, cita La Nación. 

El grave contexto de violencia que vive aquel país anotó capítulos oscuros como el reciente asesinado el fiscal César Suárez, quien formaba parte de la unidad encargada de la investigación de la delincuencia organizada transnacional y también indagaba importantes casos de narcotráfico y corrupción.

Los investigadores consideran a “Fito” como uno de los más peligrosos capos ecuatorianos del narcotráfico. Sin embargo, aunque las autoridades indican que “desapareció” de la celda, el mundo habla de su fuga y es un delincuente peligroso intensamente buscado por estas horas.

Es en medio de ese contexto que su familia llegó a nuestro país y se instaló en una vivienda de dicho barrio cerrado, en Malagueño, camino a Falda del Carmen. Las primeras informaciones indican que la esposa y los dos hijos del capo narco comenzaron a habitar una lujosa vivienda que habrán comprado en efectivo, en dólares, y a la que ingresaron en los primeros días de enero.

Se investiga ahora con qué motivo arribaron a nuestro país y qué planes tenía el propio “Fito” alojando o “escondiendo” primero a su familia en el mencionado lugar.

Finalmente, aunque no en calidad de detenidos, fueron deportados del país en medio de un intenso operativo de traslado hasta el aeropuerto de Córdoba, para ser derivados a Buenos Aires y luego al país de origen.