Boca pasó a cuartos de final de los playoffs del Torneo Apertura, pero La Bombonera no festejó. El equipo eliminó a Lanús por penales tras un 0-0 opaco, en un clima cargado que no se resolvió con el pase de ronda. Más que un desahogo, fue una noche de reclamos: hubo silbidos para los jugadores y cantos directos a la dirigencia.

Todos en la mira

Ya en la previa, la cancha habló: ovación para Merentiel y Delgado, abucheos para Rojo, Belmonte y Velasco. Durante el partido, el clásico "Movete, Boca, movete" fue apenas la primera señal de advertencia. Luego llegaron los gritos más duros: "Que se vayan todos" y "Jugadores, la c... de su madre".

El blanco, la Comisión

El final del tiempo reglamentario trajo un cántico inédito: "La Comisión, la Comisión, se va a la p...". No fue contra Riquelme, pero sí contra su gente más cercana: Cascini, Delgado y Serna. El canto nació en las plateas y lo siguieron muchos. El palco presidencial, en silencio, fue enfocado por la TV.

Un pase que no tapa el ruido

Aunque Boca sigue con vida en el torneo, el partido dejó expuesta una grieta cada vez más sonora. La victoria en los penales calmó la bronca por un rato, pero el mensaje quedó claro: el malestar no distingue jerarquías ni pergaminos. El pase a cuartos fue, apenas, un alivio momentáneo.