El triunfo histórico sobre los All Blacks en Vélez quedará grabado en la memoria del rugby argentino: fue la primera vez que Los Pumas vencieron a los neozelandeses en casa. El 29-23 del sábado 23 de agosto no solo sumó la cuarta victoria de la historia ante este gigante, sino que también dejó al seleccionado con un envión anímico clave para lo que sigue en el Rugby Championship.

¿Cuál es el próximo desafío?

El equipo de Felipe Contepomi ya apunta a Australia, rival al que enfrentará el 6 de septiembre en Townsville, desde la 1.30 de la madrugada hora argentina. Una semana más tarde, el 13, volverán a verse las caras, otra vez en suelo australiano. Los Wallabies llegan segundos en la tabla, mientras que los argentinos comparten el fondo con Sudáfrica, en un torneo todavía muy abierto.

No obstante, la alegría se vio opacada por la lesión de Tomás Albornoz. El apertura tucumano sufrió una luxación en su mano izquierda y no podrá estar en la gira por Oceanía, una baja sensible para el plantel.

Con un calendario exigente por delante, Los Pumas deberán transformar la euforia en constancia para seguir dando pelea en un campeonato que, tras la hazaña en Vélez, los ilusiona como nunca.