La Selección Argentina vivió un momento incómodo en su llegada a Chile para disputar el partido por la fecha 15 de Eliminatorias. Al aterrizar en Santiago, el plantel se encontró sin el protocolo de seguridad que exige la FIFA para delegaciones oficiales: no hubo cápsula de resguardo y debieron caminar entre empujones, gritos e insultos de parte del público local en el Aeropuerto de Santiago.

La polémica recibida a la Selección

El malestar fue generalizado en la delegación. Según trascendió, la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) de Chile, encargada de la logística, no cumplió con las pautas mínimas exigidas por FIFA. No es la primera vez que ocurre: en una visita anterior, la utilería del equipo argentino había sido inspeccionada con perros antinarcóticos.

La situación no mejoró para la Selección Argentina con la llegada al hotel Intercontinental, donde un millar de personas -la mayoría argentinos, pero también muchos chilenos- esperaban ver a los campeones del mundo. La tensión fue tal que los carabineros debieron cortar carriles del tránsito para contener al público que se agolpó en la puerta.