El Papa Francisco, acorralado

El primer ministro en funciones de Bélgica, Alexander De Croo, planteó con firmeza la necesidad de abordar los abusos a menores cometidos por miembros de la Iglesia. En un encuentro con el Papa Francisco, De Croo destacó que "hay que dar pasos concretos", así como "escuchar a las víctimas", "reconocer las atrocidades" y "hacer justicia".

El Papa Francisco, quien llegó a Bruselas el jueves por la noche, respondió a estas exigencias con una reflexión profunda sobre la gravedad de la situación. "Los abusos a menores son la vergüenza y la humillación de la guerra, y tenemos solo que pedir perdón", afirmó. Además, el pontífice argentino subrayó que la Iglesia está enfrentando este flagelo "con decisión y firmeza", implementando programas de prevención y escuchando a las víctimas afectadas.

Los duros reproches contra el Papa Francisco

Este encuentro marcó un momento histórico, ya que es la primera vez en sus once años de pontificado que el Papa enfrenta tales reproches en un evento oficial de bienvenida. Una de las víctimas, identificada como Jean-Luc, expresó su descontento ante la situación: "Esperábamos mucho más".