Violaciones sin saber: el caso que ha erizado la piel del mundo
El mundo no quita los ojos de Francia por la historia del hombre que drogaba a su mujer para que la violaran.
En Francia, ha comenzado un juicio que ha sacudido al país debido a la impactante historia de una mujer drogada durante casi una década por su propio esposo, Dominique Pelicot. Este hombre mezclaba somníferos en la comida de su esposa para dormirla y permitir que decenas de hombres abusaran de ella en su hogar en Mazan, una ciudad del sur de Francia.
Pelicot, junto a otros 50 acusados (se afirma que los involucrados son al menos 80), enfrenta cargos en un proceso que ha puesto de relieve el problema de la "sumisión química", donde las víctimas son drogadas para ser agredidas sexualmente. Los sospechosos abarcan diferentes sectores de la sociedad, incluyendo camioneros, soldados, periodistas, vecinos y profesionales de la salud.
El juicio se realizó a puertas abiertas y público por decisión de la víctima quien afirmó que quiere que el caso se conozca para que genere consciencia y los culpables enfrenten a la justicia. "Hablo por todas estas mujeres que están drogadas y que no lo saben, lo hago en nombre de todas estas mujeres que quizás nunca lo sabrán [...], para que ninguna mujer más tenga que soportar la sumisión "química".
Este caso, que ha generado un fuerte debate sobre el consentimiento y la responsabilidad en los delitos sexuales en Francia, ha llevado a reflexionar sobre el papel de los médicos, ya que la víctima había buscado ayuda durante años sin obtener un diagnóstico adecuado, lo que ha planteado preguntas sobre la formación médica en torno a estos delitos.