En plena víspera electoral, Aerolíneas Argentinas volvió a quedar en el centro del conflicto gremial. La Asociación de Pilotos (APLA) realizó una asamblea que paralizó la actividad durante cuatro horas este viernes en Aeroparque, afectando a más de 7.000 pasajeros y 60 vuelos. La protesta, en reclamo de aumentos salariales y ascensos pendientes, reavivó la tensión entre los gremios K y la empresa estatal.

El caos en Aeroparque por los gremios K

"Los pilotos permaneceremos unidos ante los embates empresariales y gubernamentales", advirtieron desde APLA, que además cuestionó la "falta de previsión" de la compañía tras el retiro de ocho aviones de su flota. Para los sindicalistas, las fallas mecánicas y la falta de inversión agravan la situación operativa.

Desde la empresa lamentaron la medida y señalaron que llega "en un momento clave de consolidación financiera, tras más de quince años de pérdidas operativas". Aerolíneas aseguró que el paro "daña la confianza de los pasajeros" y no aporta soluciones estructurales.

El conflicto se da en medio de una campaña donde los gremios afines al kirchnerismo buscan mostrarse activos en la antesala de las elecciones. Sin embargo, en el medio quedaron miles de pasajeros que no pudieron llegar ni salir de Aeroparque.