El presidente Javier Milei finalizó su visita a Estados Unidos con un fuerte respaldo político y económico. Tras reunirse con Donald Trump y, más tarde, con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el libertario consolidó sus alianzas estratégicas en medio de un escenario internacional marcado por la guerra en Gaza y la tensión financiera local. En su discurso en la ONU, volvió a reclamar la liberación de los rehenes argentinos en manos de Hamas.

De vuelta a su gestión

El lunes, Milei buscará trasladar ese impulso al plano interno con la reunión del Consejo de Mayo en Casa Rosada. El encuentro, encabezado por Guillermo Francos, reunirá a ministros, gobernadores, empresarios y sindicalistas para discutir los diez puntos del Pacto de Mayo. En la agenda figuran las reformas laboral y tributaria, además de la coparticipación, en un clima atravesado por las negociaciones con Washington.

Un gesto a Trump y a la gobernabilidad

La convocatoria responde también a un pedido explícito de Trump: acercar posiciones con la oposición para reforzar la gobernabilidad. Sin mayorías en el Congreso, Milei necesita recuperar a los dialoguistas que lo acompañaron en 2024 y que se distanciaron en los últimos meses. El desafío será tender puentes en plena campaña, cuando varios mandatarios provinciales ya perfilan sus propios espacios de poder.

Al cónclave asistirán figuras como Alfredo Cornejo, Carolina Losada, Cristian Ritondo, Gerardo Martínez y Martín Rappallini. No obstante, un grupo de políticos -entre ellos Sergio Ziliotto, Gustavo Sáenz y Alberto Weretilneck- reclama discutir el alcance del acuerdo financiero con Estados Unidos antes de definir su apoyo. Así, el Consejo de Mayo aparece como la primera gran prueba política de Milei tras el espaldarazo internacional.