El Gobierno nacional sufrió su revés más duro desde que Javier Milei llegó al poder. El Congreso rechazó el veto presidencial a la ley de Emergencia en Discapacidad y dejó en evidencia que el oficialismo perdió el control del Parlamento. La derrota, además, se da en medio de un clima electoral adverso y con el Presidente fuera del país.

En la Rosada se multiplicaron las reuniones para definir los pasos a seguir. Desde la Procuración del Tesoro hasta Legal y Técnica se analizan opciones: judicializar la norma, frenar su aplicación o incluso no promulgarla en tiempo y forma. La apuesta, en cualquier caso, es ganar tiempo y estirar el debate en los tribunales.

El dilema de la judicialización

Aunque Milei había prometido ir a la Justicia frente a cualquier decisión que comprometa el equilibrio fiscal, en las últimas horas surgieron dudas. Algunos asesores advierten que llevar el caso a la Corte podría implicar un riesgo institucional mayor. Otros, en cambio, insisten en que la oposición incumplió la Ley de Administración Financiera al no especificar recursos para el gasto.

Política y tiempos electorales

El rechazo al veto llega justo antes de las elecciones en la provincia de Buenos Aires, donde los libertarios temen un mal resultado. Por eso, la decisión final se postergará hasta después de la votación. En paralelo, el Ejecutivo se aferra al plazo legal de diez días para promulgar la norma, alargando la incertidumbre.

Un conflicto que recién empieza

El Gobierno ya avisó que no habrá actualizaciones automáticas en las prestaciones mientras no se agoten todas las instancias. La oposición promete dar batalla y judicializar cualquier maniobra dilatoria. La pelea por la emergencia en discapacidad no terminó en el Senado: recién empieza un nuevo round, esta vez en los pasillos judiciales.