Toma, entonces paga

La Cámara de Diputados de Mendoza aprobó una ley que obligará a los conductores que choquen en estado de ebriedad a pagar por sus tratamientos médicos. Esta medida busca recuperar los costos que estos accidentes imponen al sistema de salud público y reducir las erogaciones que afectan a la provincia. 

La nueva normativa sancionada este miércoles, permitirá al Ministerio de Salud y Deportes cobrar los gastos de salud generados por conductores ebrios. Estos costos incluyen desde internaciones, que pueden costar entre $10 y $15 millones, hasta traslados en ambulancia y días de internación en terapia intensiva, sumando importantes montos al sistema sanitario. 

Además de asumir los costos médicos, los conductores ebrios enfrentarán multas que varían entre $381 mil y $1.143 mil, según la cantidad de alcohol en sangre y la reincidencia, junto con la retención del carnet de conducir. Esta ley representa un avance en la lucha contra la conducción irresponsable y busca disminuir los accidentes de tránsito causados por el consumo de alcohol.