La película "La mujer de la fila" es una coproducción argentino-española dirigida por Benjamín Ávila y estrenada el 4 de septiembre de 2025 en las salas de cine de Argentina. El film pertenece al género drama social y cuenta con un elenco destacado encabezado por Natalia Oreiro, Amparo Noguera, Alberto Ammann y Federico Heinrich. La trama aborda la historia de una madre que emprende una lucha personal por conocer las causas del arresto de su hijo, enfrentándose a la frialdad del sistema judicial.

Una historia inspirada en hechos reales

El personaje principal, Andrea, es una mujer de clase media de la Ciudad de Buenos Aires cuya vida se ve sacudida por la detención inesperada de su hijo. A medida que busca respuestas, se enfrenta a la burocracia del sistema penitenciario y judicial, los prejuicios sociales y la soledad de quienes viven esa situación. En la cárcel conoce a otras mujeres -las llamadas "mujeres de la fila"- que, tras un inicio distante, se transforman en su sostén emocional y red de contención.

La historia está basada en la vida real de Andrea Casamento, fundadora de la Asociación Civil de Familiares de Detenidos (ACiFaD), una organización que desde hace años acompaña a familiares de personas privadas de libertad en Argentina.

Filmación en un escenario inédito

Uno de los aspectos más notables de la producción es que se filmó dentro del Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza, siendo la primera vez que se autorizó el rodaje de una película en ese establecimiento. La decisión del director Benjamín Ávila, reconocido por su trabajo en Infancia clandestina, fue utilizar locaciones reales para retratar con autenticidad la atmósfera opresiva de las prisiones argentinas.
El equipo técnico debió adaptarse a estrictas medidas de seguridad, lo que aportó realismo al relato y un tono profundamente humano a cada escena.

Un reflejo social y emocional

La mujer de la fila no solo muestra la historia individual de Andrea, sino que denuncia el impacto emocional y social que sufren las familias de los reclusos. La película invita a reflexionar sobre el abandono estatal, la estigmatización social y la fuerza de las redes de apoyo entre mujeres que atraviesan la misma situación.

Con una fotografía sobria y un tono íntimo, la cinta busca dar voz a quienes rara vez son protagonistas en la pantalla grande. Para Natalia Oreiro, este papel representa uno de los desafíos más profundos de su carrera, al poner cuerpo y alma a una madre que no se rinde frente a la adversidad.