Foto de Menem llorando: Víctor Bugge recordó cómo fue el día que vio llorar a Carlos Menem
Víctor Bugge compartió una de las escenas más humanas del poder: el llanto de Menem en la intimidad presidencial.
Víctor Bugge fue testigo privilegiado de los pasillos del poder argentino. Desde 1978, ejerció como fotógrafo oficial en la Casa Rosada, retratando a cada presidente desde Jorge Rafael Videla hasta Javier Milei. Pero entre todos los momentos que vivió, uno quedó grabado como el más humano y doloroso: el día que vio llorar desconsoladamente a Carlos Menem, tras la muerte de su hijo, Carlos Menem Jr.
El día que Menem rompió en llanto
En una entrevista reciente con la revista Caras, Bugge relató el impacto de aquel instante. La tragedia ocurrió el 15 de marzo de 1995, cuando el helicóptero que piloteaba el hijo del presidente se estrelló en Ramallo. Menem regresó rápidamente a la Quinta de Olivos y, según Bugge, fue en ese entorno de privacidad donde el mandatario se quebró por completo. "Víctor, se nos fue Carlitos", le dijo Menem apenas lo vio. "Terminamos llorando los dos", confesó Bugge, quien también había perdido un hijo.
El fotógrafo captó con su lente, y con su corazón, ese momento en que el presidente dejó de ser figura pública para convertirse simplemente en un padre devastado.
Un fotógrafo con mirada sensible
Bugge, que se define como un retratista institucional más que oficialista, siempre buscó humanizar a los presidentes. Rechazaba la pose forzada y prefería capturar gestos genuinos: una risa inesperada, un silencio tenso, un abrazo sincero. Su estilo se volvió una marca registrada dentro y fuera del país. Entre sus fotos más recordadas está la de Menem abrazado a Maradona en el cementerio, otro momento cargado de simbolismo.
Del archivo a la pantalla
El episodio del llanto de Menem también inspiró escenas en la serie biográfica sobre el expresidente que lanzó Amazon Prime Video. Aunque Bugge no participó directamente del rodaje, fue consultado para asesorar al actor que lo interpreta, aportando detalles de cómo sostenía la cámara, cómo se movía en los actos y, sobre todo, cómo se comportaba en la intimidad del poder.