La segunda temporada de División Palermo, la serie argentina creada y protagonizada por Santiago Korovsky, llegó a Netflix con nuevos conflictos, más acción y un elenco renovado. Entre las incorporaciones más destacadas se encuentra Juan Minujín, quien interpreta a Martín "Milton" Gauna, un personaje que rápidamente despierta sospechas y se convierte en una de las figuras centrales de la historia.

¿Quién es Milton Gauna?

En esta nueva entrega, Milton Gauna es el dueño de un café de especialidad que, lejos de ser solo un barista apasionado, parece tener conexiones con el crimen organizado. La Guardia Urbana comienza a investigarlo cuando su negocio se vincula con una red delictiva que opera en las sombras. Su rol mezcla ambigüedad, carisma y un trasfondo oscuro que pone en jaque la aparente paz que había conseguido el equipo de inclusión urbana.

Un giro en el tono de la serie con un actor de peso

La llegada de Minujín no solo aporta peso actoral a la comedia negra, sino que también amplía el tono de la serie hacia lo policial, sin perder el absurdo y la sátira que la hizo famosa. Con su estilo contenido pero intenso, el actor construye un personaje que se mueve entre la desconfianza, el humor sutil y el misterio constante.

Un actor multifacético en un nuevo desafío

Juan Minujín es uno de los intérpretes más versátiles del cine y la televisión argentina. Recordado por sus papeles en El Marginal, El Reino y Zama, entre muchos otros, su incorporación en División Palermo marca un giro interesante en su carrera, explorando el universo de la comedia absurda con gran naturalidad.

La serie que sigue cuestionando la realidad argentina

La serie continúa abordando con ironía y profundidad temas como la seguridad, la representación, el poder político y los medios de comunicación, ahora con nuevos desafíos para la Guardia Urbana, que ya no solo busca reconocimiento: también necesita sobrevivir a una red de corrupción que la rodea.

Un personaje que promete dar que hablar

La participación de Minujín como Milton Gauna promete ser uno de los puntos fuertes de esta temporada, agregando tensión narrativa y abriendo nuevas preguntas sobre quiénes son realmente los buenos y los malos en este retrato irónico de la realidad argentina.