La serie sensación del momento no solo sorprendió con su propuesta sobrenatural, sino también con un cierre de temporada tan oscuro como emocional. "Cazador de demonios" (The Bondsman), el nuevo hit de Prime Video protagonizado por Kevin Bacon, dejó a su audiencia sin palabras con un episodio final que mezcla culpa, redención y un dilema ético de escala apocalíptica.

Cazador de demonios, final explicado

El final comienza con una confesión desgarradora: Hub le admite a su familia que mató accidentalmente a Sheryl, confundiéndola con su enemigo, Lucky. La revelación sacude a su ex, Maryanne, quien se aleja con su hijo Cade, juzgando a Hub con dureza.

Abatido, el protagonista interpretado por Kevin Bacon parece haber perdido toda esperanza. Pero en una escena clave, reaparece Midge -resucitada luego de morir a manos de un demonio- para advertirle que Lilith, una figura celestial caída en desgracia, planea conquistar el mundo humano

La historia de Lilith se revela como una metáfora potente: fue el ángel favorito de Dios por su voz celestial, pero tras ser traicionada, cayó en el infierno donde fue abusada por el mismísimo Diablo.

La explosión violenta en el final de Cazador de Demonios

Mientras tanto, la violencia estalla. Lilith, en el cuerpo de Sheryl, desata una masacre en un restaurant: convierte a las mujeres en seguidoras fanáticas y asesina a los hombres. En paralelo, Lucky logra que arresten a Maryanne y a Kitty para manipular a Cade, pero el plan fracasa cuando se descubre que Sheryl ha vuelto de entre los muertos.

Con estos elementos, el final de temporada deja la puerta abierta a una segunda parte. La batalla entre el bien, el mal, y todo lo que queda en el medio, no ha terminado. "Cazador de demonios" no solo cerró su primer ciclo con fuerza, sino que elevó la vara para las series de terror contemporáneo.