Manual para señoritas, la serie española que ha conquistado Netflix, dejó a sus espectadores con un final tan sorprendente como frustrante. A lo largo de ocho episodios, la historia de Elena Bianda y su complejo rol como casamentera en la alta sociedad madrileña mantuvo el interés del público. Sin embargo, lo que parecía encaminado a una conclusión romántica terminó con una vuelta de tuerca que nadie vio venir.

La relación entre Elena y Santiago era el eje de la tensión romántica en la serie. La química entre ambos auguraba un desenlace feliz, pero la narrativa decidió tomar un camino diferente. Cristina, embarazada de Eduardo, ve en Santiago una salida a su problema, lo que lo lleva a sentirse engañado y marcharse. Mientras tanto, Elena, impulsada por el amor, intenta detenerlo tras leer un manuscrito que él escribió.

Lo que parecía un cierre emotivo se convirtió en una cruel ilusión. La escena final, en la que Elena alcanza a Santiago y se reconcilian, resultó ser solo un sueño. En la realidad, nunca lo alcanzó, dejándola sin pareja, sin trabajo y con su reputación en riesgo. Una decisión narrativa audaz que, lejos de cerrar la historia, deja abierta la puerta a una segunda temporada.

¿Habrá segunda temporada?

Con tantas incógnitas sin resolver, el clamor del público por una continuación es fuerte. La historia de Cristina y Eduardo, el destino de Santiago y el futuro de Elena como casamentera son puntos que podrían explorarse en nuevos episodios. Netflix aún no ha confirmado una renovación, pero el impacto del final hace que una segunda temporada sea más que probable.

Manual para señoritas apostó por un desenlace que rompe con las convenciones del género. En lugar de un final feliz, nos dejó con una sensación agridulce y con ganas de más. Ahora, solo queda esperar si Netflix escucha a los fans y decide darle a la historia una nueva oportunidad.