La serie española de Netflix, Olympo, ambientada en el ficticio Centro de Alto Rendimiento Pirineos, gira en torno a la obsesión por el éxito deportivo y los oscuros mecanismos detrás del alto rendimiento. En el centro de esa tensión se encuentra Amaia Olaberria, la capitana del equipo de natación sincronizada, cuyo final dejó a los espectadores con ganas de más.

¿Qué pasa con Amaia en Olympo?

Desde el colapso inicial de su amiga Nuria, quien la supera en las marcas de entrenamiento, Amaia empieza a sospechar que algo no está bien en Olympo. Su viaje en busca de respuestas la lleva hasta Andorra, acompañada por Charly Lago, pero no logra encontrar pruebas concretas. La organización, liderada por Jana y Hugo, parece moverse siempre un paso adelante.

Las decepciones se acumulan: su amiga Zoe consigue una grabación que podría incriminar a la organización, pero esta es destruida. Nuria regresa misteriosamente recuperada, y Roque, su confidente, sana de una lesión en tiempo récord. Cuando incluso su madre la insta a "dejar las conspiraciones" y concentrarse en ganar, Amaia parece quebrarse.

Acorralada y sin respaldo, toma una decisión que marca un punto de no retorno: hace trampa. Fátima la descubre, pero antes de poder denunciarla, cae por las escaleras en circunstancias confusas. La duda queda flotando, y con ella, la sospecha de que la protagonista ha cruzado una línea peligrosa.

Rechazada por Nuria, quien elige a otra compañera, y enfrentada a sus amigos, Amaia queda sola. La tristeza que siente es explotada por los líderes de Olympo, que la observan desde las cámaras con morbosa satisfacción. Pero en la competencia final, algo ha cambiado: Amaia rompe el récord junto a Nuria, pero cae desmayada en la piscina en un final que dejó a los espectadores con ganas de más.