En Macondo, el enigmático pueblo de Cien años de soledad, la muerte de José Arcadio se alza como uno de los mayores misterios. Este personaje, primogénito de José Arcadio Buendía y Úrsula Iguarán, regresa tras años de ausencia, pero su reaparición está marcada por secretos y conflictos que culminan en un desenlace oscuro.

La escena del crimen muestra un entorno cerrado: José Arcadio es encontrado muerto con una línea de sangre que lleva hasta su cuerpo. No hay signos de un arma homicida ni testigos que escuchen algo inusual. 

Rebeca, su esposa, afirma que estaba en el baño durante los hechos, pero su relato deja dudas sobre su inocencia. Aunque parecía felizmente casada, el aislamiento y el rechazo social de la pareja podrían haber generado tensiones desconocidas. 

Sin embargo, Rebeca se recluyó tras la muerte de su esposo, vistiendo de luto perpetuo, lo que dificulta determinar si su duelo es sincero o parte de una fachada.

Las teorías apuntan a enemigos ocultos. José Arcadio, conocido por apropiarse de tierras ajenas, pudo haber sido víctima de represalias por parte de antiguos propietarios. 

También se especula que algún enemigo del pasado, surgido de su vida errante con los gitanos, haya viajado hasta Macondo para saldar cuentas. A pesar de las hipótesis, la verdad permanece oculta, sumando esta muerte al halo de lo inexplicable en Macondo.

Otro aspecto inquietante de la narrativa es la relación entre Aureliano José y su tía Amaranta. Tras la muerte de Remedios, Amaranta asume el rol de madre para Aureliano José, pero la relación degenera en un vínculo prohibido.

¿Murió Aureliano en Cien años de Soledad? 

Aureliano José, obsesionado, expresa deseos de estar con ella, mientras Amaranta lucha entre el rechazo y momentos de debilidad. Finalmente, Aureliano huye al ejército, donde muere abatido, sin superar su pasión por Amaranta, quien jamás encuentra el amor y dedica sus días a preparar su propio sudario.

La adaptación de Netflix expone estos complejos eventos con maestría, destacando los temas de soledad, deseo y destino que atraviesan a los Buendía.