La primera temporada de Pulso cerró con decisiones drásticas, cambios de liderazgo y un secreto finalmente revelado. Con un hospital en plena reestructuración y varios vínculos personales fracturados, los fans quedaron con una sola pregunta: ¿habrá segunda temporada? Aunque Netflix aún no confirmó oficialmente su renovación, todo indica que hay historia para rato.

Un final que dejó muchas puertas abiertas

El último episodio mostró a Xander confesando el error médico que lo persigue desde el hospital Kennedy y enfrentando a la junta directiva. Al mismo tiempo, Danny fue retirada del programa por decisión de Natalie Cruz, influenciada por la poderosa familia Phillips. Sam Elijah asumió como nuevo jefe de residentes, y Patrick Sánchez tomó el mando del área de urgencias, prometiendo un nuevo orden.

Pero los conflictos recién empiezan: Cruz quedó en una posición incómoda frente a la administración, Sophie lucha con sus sentimientos por Camila -quien reveló estar comprometida-, y Tom Cole podría enfrentar una demanda. El hospital Maguire ya no es el mismo, y el clima tenso entre los personajes augura nuevos enfrentamientos, tanto personales como profesionales.

¿Qué dicen los protagonistas?

Aunque Netflix guarda silencio, los actores ya dejaron entrever sus deseos. "Patrick le va a hacer la vida imposible a Xander", bromeó Colin Woodell (Xander) en una entrevista. Justina Machado (Cruz), en cambio, fue más directa: "No se va a rendir sin luchar". Todo indica que las rivalidades seguirán escalando y que el corazón del drama, lejos de apagarse, acaba de recibir una nueva descarga.

Los números acompañan: Pulso fue un éxito global y mezcló como pocas series el vértigo de la emergencia médica con romances peligrosos y dilemas éticos. Si Netflix sigue la lógica de otros dramas procedimentales, la renovación debería anunciarse pronto, con vistas a un estreno en 2026.

Mientras tanto, los fans siguen pendientes. Porque si algo quedó claro tras ese cierre, es que Pulso no terminó: recién empieza a latir.