Quién era Elsa Serrano: ¿aparece en la serie de "Menem"?
La diseñadora más famosa del poder en los años '90 vuelve al centro de la escena tras el estreno de la serie "Menem" en Prime Video. ¿Está su figura representada? ¿Qué fue de su vida?
La pregunta empezó a circular con fuerza desde que Menem, la serie de Prime Video, se convirtió en un fenómeno: ¿Amanda Salas es en realidad Elsa Serrano? Aunque el personaje interpretado por Jorgelina Aruzzi no lleva ese nombre, su estética, su profesión y su cercanía con los protagonistas del poder despiertan más de una sospecha.
Amanda Salas aparece como una modista riojana, casada con un fotógrafo, siempre presente tras bambalinas, cerca de las esposas de los funcionarios, entre vestidos, lentejuelas y secretos. Su figura, aunque ficticia, recuerda mucho al rol que Elsa Serrano ocupó en la vida real durante la década menemista.
Elsa Serrano fue mucho más que una diseñadora de moda. Fue la modista del poder, una mujer que supo vestir con elegancia tanto a Zulema Yoma como a Zulemita Menem. También fue la responsable de los atuendos de figuras como Mirtha Legrand, Susana Giménez y Norma Aleandro. Su estilo marcó una época.
Nacida en Calabria, Italia, en 1941, su verdadero nombre era Elsa Romio. Llegó a la Argentina en barco, a los 14 años. A los 19 se casó y abrió su primera boutique, Fiorella, sobre la calle Soldado de la Independencia. Allí empezó una carrera que la llevaría a lo más alto del mundo de la moda.
En la cumbre de su carrera, Serrano era habitué de la Quinta de Olivos y del avión presidencial. Diseñaba para los eventos oficiales, las giras internacionales y hasta los casamientos más mediáticos. Fue la autora del vestido de Claudia Villafañe en su boda con Diego Maradona y del traje de Susana Giménez cuando se casó con Huberto Roviralta.
Sin embargo, el vínculo con la familia Menem no terminó bien. La diseñadora aseguró que nunca le pagaron por los vestidos y llegó a iniciar acciones legales contra Zulema y Zulemita. Aun así, su nombre quedó ligado para siempre al glamour del menemismo y su estética ostentosa.
La historia de la modista Elsa Serrano
La serie Menem introduce a Amanda como un personaje que representa "la voz del pueblo", pero también una mirada femenina y estética del poder. Aunque los productores no confirmaron que esté basada en Elsa, las coincidencias son demasiadas como para ignorarlas.
El trágico final de Elsa Serrano fue otro de los motivos por los que su figura volvió a resonar. En septiembre de 2020, murió en un incendio en su departamento de Retiro. Tenía 79 años. El fuego, causado por un desperfecto eléctrico, le impidió escapar. La noticia conmocionó al país.
A pesar de los años y los vaivenes económicos, Serrano nunca dejó de trabajar. Tras su quiebra en 2001, rearmó su taller en su propio hogar, con una mesa comprada en Easy y la compañía de tres modistas fieles. "Yo soy una luchadora incansable", dijo alguna vez.
Más allá de la polémica, los lujos y las luces del espectáculo, Elsa Serrano fue un ícono de la moda argentina, una mujer que impuso un estilo y que supo moverse como pocas en las alturas del poder político y social. Su historia merece ser contada, aunque sea bajo un nombre ficticio.
Hoy, Menem la evoca sin nombrarla. Amanda Salas no es Elsa Serrano, pero lleva su sombra en el hilo de cada vestido que cose en la ficción. Y en ese guiño silencioso, la serie rinde homenaje a una mujer que marcó, con aguja e hilo, toda una era.