En la serie Menem, Amanda Salas, interpretada por Jorgelina Aruzzi, emerge en la pantalla como la esposa de Olegario Salas (Juan Minujín), el fotógrafo ficticio que recorre la intimidad del poder menemista. Ella, una costurera riojana, acompaña a su marido en las bambalinas de la historia. Y aunque fue creada para humanizar el relato, no vemos un paralelismo directo con ninguna persona real.

Pero la conexión estilística con Elsa Serrano, famosa modista de los '90, no pasó desapercibida. Serrano vistió a figuras como Zulema Yoma y fue referente en ese círculo presidencial. Además, su relación cercana con la familia Menem, asesorando en imagen y vestuario, encaja con el perfil atribuido a Amanda: una mujer que bordea las cámaras, percepciones y secretos del poder.

Aunque Amanda Salas no tiene nombre ni biografía reales, su oficio de modista y su presencia silenciosa evocan un rol similar al de Serrano: diseñadora íntima de las estrellas del menemismo. No obstante, ni Aruzzi, ni la producción, han confirmado que Elsa fuera la inspiración directa. Y no hay documentación oficial que lo respalde.

La serie, basada en hechos reales pero con licencias dramáticas, recrea escenas como el desalojo de Zulema Yoma o la figura de las "brujas", pero no pretende narrar documentalmente todos los nombres implicados. En ese contexto, introdujo a Amanda -junto a Olegario y su hijo Miguel- como voz del pueblo bajo el menemismo, un recurso creativo para expresar emociones colectivas.

¿Amanda Salas es Elsa Serrano en "Menem"?

Por su parte, Elsa Serrano fue una figura concreta. Italo-argentina, se hizo conocida por vestir a celebridades como Mirtha Legrand y Susana Giménez, y también a Zulema Yoma, acompañándola en giras oficiales. Su rol detrás del escenario político le otorgó visibilidad como "la modista del poder".

Sin embargo, ningún guionista reconoció oficialmente que el personaje de Amanda esté inspirado en ella. Todo se basa en especulaciones temáticas, surgidas al observar su rol y oficio, y compararlo con el perfil de Serrano: cercanía, costura, confidencias y silencios compartidos con la elite menemista.

Grilla y vestuario sugieren un guiño, una evocación -no una reproducción- de una figura como Elsa Serrano. Amanda es un personaje ficticio que plasma, metafóricamente, a las modistas de la política de aquellos años, y tal vez ofrezca una mirada simbólica sobre la influencia cultural y estética del menemismo.