Con el estreno global de la tercera y última temporada de El Juego del Calamar en Netflix, los fanáticos quedaron impactados no solo por el final del protagonista Gi-hun, sino también por la inesperada aparición de Cate Blanchett en la escena final.

En los últimos minutos del sexto episodio, la cámara se traslada a Los Ángeles. Allí, la actriz australiana interpreta a una nueva versión del "reclutador", el personaje que en las primeras temporadas jugaba al ddakji en la estación de tren. Blanchett aparece intentando convencer a un hombre sin hogar para que se sume al macabro juego. Una bofetada como método de persuasión, y una tarjeta dorada sellan el guiño.

Esta participación marca un cambio de escala en el universo de la serie. Lo que comenzó en Corea del Sur ahora se expande a nivel internacional, abriendo la puerta a lo que sería una serie derivada ambientada en Estados Unidos.

"En realidad, lo mantuvimos en estricto secreto entre nosotros durante mucho tiempo", dijo el creador Hwang Dong-hyuk sobre el cameo, en una charla posterior al estreno.

La actriz, ganadora de dos premios Oscar y con una filmografía cargada de éxitos, aceptó el papel como una aparición especial. Según reveló Lee Byung-hun, Blanchett y él no compartieron escena en el rodaje: "Rodamos nuestros papeles por separado... Nos despedimos sin siquiera saludarnos".

El juego del calamar, temporada tres

La participación de Blanchett no significa que haya sido confirmada para una serie futura, pero su presencia ya genera expectativas. Según fuentes de la industria, Netflix tiene en marcha una producción titulada Squid Game: America, que comenzaría a filmarse en diciembre en Los Ángeles.

Con guion de Dennis Kelly y producción de David Fincher, esta secuela seguiría las mismas reglas del juego, pero en territorio estadounidense.

Por ahora, no hay confirmación oficial de parte de Netflix, pero el final de la tercera temporada dejó en claro algo: el juego no terminó. Solo cambió de escenario... y de idioma.