En China, los hospitales están desbordados estos días con pacientes y víctimas de COVID que esperan hasta en el suelo a ser atendidos. El colapso también llega a los crematorios. Los estudios estiman que un millón de personas pueden morir en los próximos meses.
Un video del Hospital General de la Universidad Médica de Tianjin muestra la angustia de los enfermos y la carencia de personal suficiente y de insumos. Los propios médicos caen enfermos, por lo que algunos centros ya no pide a su personal que se sometan a pruebas: es demasiado grande el riesgo a que den positivo.
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